Nueva declaración sobre la confiscación de primates en el Cairo
En septiembre de 2001, el servicio de aduanas de Egipto confiscó un gorila y un chimpancé a su llegada al Cairo sin los permisos CITES necesarios. El servicio veterinario egipcio decidió disponer de los animales ahogándolos por miedo a que pudiesen entrañar riesgos para la salud.
Comprensiblemente, un gran número de individuos y organizaciones expresaron preocupación acerca de la forma en que se había tratado este asunto. Me puse en contacto con las autoridades egipcias y el Ministro de Agricultura ordenó que se iniciase una investigación.
Las autoridades egipcias me han comunicado ahora los resultados de dicha investigación.
La mujer detenida en posesión de los animales se entregó a la policía y la Oficina del fiscal de distrito se ocupa actualmente de este caso. La Autoridad Administrativa CITES de Egipto envió una carta oficial a la compañía de aviación en la que habían viajado la mujer y los animales desde Nigeria a Egipto. Las disposiciones de la Convención y los decretos ministeriales de Egipto sobre el comercio y la importación ilegal de especies en peligro se comunicaron a dicha compañía. Se solicitó a la compañía de aviación que difundiese esta información en todas sus oficinas a través del mundo.
Egipto comunicó información sobre el caso a las autoridades de Nigeria, que también han iniciado una investigación.
Por último, las autoridades de Egipto compilaron información sobre las instituciones y los centros de rescate idóneos a los que podrían transferirse animales vivos confiscados o decomisados en el futuro.
Expreso mi agradecimiento a Egipto por su respuesta, así como aquellas personas que han manifestado interés en este caso. Asimismo, me complace que la participación de la Secretaría CITES haya servido de ayudado para resolver algunos de los aspectos que ocasionaban inquietud.
Una idea interesante esbozada por varias organizaciones encargadas de la protección de animales consiste en preparar directrices para la disposición incruenta de animales confiscados y compilar y poner a disposición información sobre centros de rescate y sobre su capacidad para albergar animales. Evidentemente, la Secretaría CITES no escatimará esfuerzos para poner esta información a disposición de las Partes en la Convención.